Más gráficos, más lectores: historias visuales del coronavirus
How two international publications used charts and graphics to reach a wider audience
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En la era de la información y en tiempo de pandemia los datos no escasean. Al contrario, los lectores cada vez tienen más recursos y más fuentes de información para escoger. Por esta razón, periodistas y creadores de contenido están buscando la manera de atraer usuarios. Tenemos una teoría: “more charts = more readers” y el artículo “Why outbreaks like coronavirus spread exponentially, and how to «flatten the curve»” del Washington Post puede confirmarlo.
Cuando los gráficos responden a un propósito claro, los lectores tienen la posibilidad de percibir el mensaje con facilidad. El Washington Post la tuvo clara, pues 11 días después de que la Organización Mundial de la Salud anunciara el Covid-19 como pandemia, publicaron un artículo que explica de manera fácil y sencilla cómo se contagia el Coronavirus. Al día de hoy, es la publicación de este medio con más visitas y se encuentra disponible en 13 idiomas.
Ellos escogieron explicar el nuevo fenómeno de manera gráfica. A través de la simulación, visualizaron cómo se propaga el virus y cómo se puede evitar el contagio cuando se practica el distanciamiento social. El éxito de la publicación, explica el editor de Gráficos del Washington Post, Chiqui Esteban, “se debe en gran parte a haber sido lo que todo el mundo estaba buscando en ese momento para compartir con otros, explicado de una manera muy efectiva y fácil de ver. Compartir una visualización es más fácil, porque se ve rápido de qué va que una larga explicación en texto.” En lugar de frustrar a los usuarios con nuevas palabras y términos carentes de sentido por el desconocimiento de su significado, escogieron hacer la información digerible.
Actualmente el desafío es evidente para el periodismo que cubre temas de salud y ciencia pero el reto de atraer la atención de las audiencias es del periodismo en general. La visualización de datos es la respuesta que no se limita a temas de tecnología o deportes o política. En contraste, puede adaptarse a cualquier tema, siempre que sea utilizada de manera estratégica. Los gráficos deben ser “una pieza de trabajo que es bonita, atractiva, simple, fácil de usar, fácil de entender, precisa y profundamente informativa” explica Stephen Few, autor de varios libros sobre visualización de datos. De hecho, en situaciones - como la pandemia actual - los lectores sí que están buscando información y entre más adaptada a su realidad, fácil de analizar y digerible, seguro será más fácil de compartir.
Todavía intentando descifrar cómo se propaga el Covid-19, El País publicó “Un salón, un bar y una clase: así contagia el coronavirus en el aire”. Tomaron situaciones como los contagios de más de 70 personas en una fiesta y de una docena de clientes en un bar para ilustrar la transmisión del virus en lugares cerrados. Así mismo, tuvieron en cuenta algunas variables como el tiempo, tamaño, cantidad de personas, uso de tapabocas y aire con el fin de simular las situaciones en las que el Coronavirus se propaga más rápido.
Este artículo también tuvo buena cantidad de lectores. Los usuarios, ciertamente estaban buscando información para comprender una realidad científica. Seguro habían más opciones: una entrevista con un experto explicando la propagación o la crónica de los casos de contagio. Sin embargo, visualizar la realidad científica fue lo que atrajo a los usuarios. De manera que, las visualizaciones y los gráficos que traducen los términos desconocidos en situaciones cotidianas, son una herramienta al servicio del periodismo.
Las visualizaciones de datos son instrumentos que, bien utilizados, captan la atención de los usuarios y les permiten desglosar la información que un texto largo o una hoja de cálculo no lograrían con la misma facilidad. No son el camino corto para informar. Al contrario, para hacerlo de manera responsable y atractiva, el proceso de creación de visualizaciones debe ser cuidadoso, pues en palabras de Alberto Cairo, “todo buen infográfico es funcional como un martillo, ‘multicapa’ como una cebolla, bello y verdadero como una ecuación matemática”.
Según la analogía de Cairo, los gráficos deben ser útiles. Por eso se debe tener claro el propósito por el cual se quiere incluir una visualización, para cada objetivo hay una herramienta: gráfico de barras, gráfico de líneas, mapas, pictogramas… hay muchas posibilidades. Por otro lado, no deben limitarse a resumir la información; en cambio, deberían permitirle al usuario profundizar en los datos a medida que los analiza y comprende. Para esto, el periodista debe preguntarse por la relevancia del contenido para su audiencia, de qué manera le impacta y cómo se ve eso en el contexto de sus lectores.
Finalmente, las visualizaciones no deben reñir entre lo estético y lo eficaz. Una visualización debe ser entendible, debe estar basada en información contrastada y debe ser transparente en cuanto a la fuente de la que provienen los datos. De manera que cuando la investigación, el diseño y la utilidad van de de la mano, los lectores dudan menos en compartir el contenido y de esta manera llega a una audiencia más amplia.